Si cualquier campaña electoral tiende a ser inaguantable, no quiero ni imaginar como debe ser sufrir en directo la campaña a las elecciones para elegir al nuevo emperador.
Hasta aquí llegan ecos que hablan de discursos vibrantes, escándalos, donaciones on line y convenciones multitudinarias. Todo ello aderezado con sesudos análisis que transmiten más desorientación que certeza. Un circo al que no estamos invitados.
Pero quizás sea en el campo de la imagen, donde la campaña USA nos esté dejando algunas de sus mejores perlas. Se trata de documentos que nos permiten leer entre líneas y que suelen mostrarse más elocuentes y sinceros que la mayoría de los discursos. Es el caso de imágenes como HOPE, el retrato de Obama realizado por Obey, que se ha convertido en icono no-oficial de su campaña. Es tan rígido y pretencioso que casi resulta cómico. De hecho, son muchos los que, como Lawrence West, cuestionan el mesianismo de Obey y del propio Obama.
Hasta aquí llegan ecos que hablan de discursos vibrantes, escándalos, donaciones on line y convenciones multitudinarias. Todo ello aderezado con sesudos análisis que transmiten más desorientación que certeza. Un circo al que no estamos invitados.
Pero quizás sea en el campo de la imagen, donde la campaña USA nos esté dejando algunas de sus mejores perlas. Se trata de documentos que nos permiten leer entre líneas y que suelen mostrarse más elocuentes y sinceros que la mayoría de los discursos. Es el caso de imágenes como HOPE, el retrato de Obama realizado por Obey, que se ha convertido en icono no-oficial de su campaña. Es tan rígido y pretencioso que casi resulta cómico. De hecho, son muchos los que, como Lawrence West, cuestionan el mesianismo de Obey y del propio Obama.
No son mejores las imágenes que llegan desde Manifest Hope, la exposición organizada en la Andenken Gallery de Denver coincidiendo con la Democratic National Convention. Además del propio Obey, se expusieron trabajos de Ron English, Grotesk, The Date Farmers, Dave Choe, Sam Flores, Emek, Chris Pastras, Jeff Zimmerman o Gary Bareman.
El Partido Republicano, al no contar con la complicidad del artisteo yanqui se evita ciertos malos tragos. En su caso, son los propios candidatos los que nos reportan imágenes antológicas. Como la que sin duda, es hasta el momento una de las imágenes más impactantes de la campaña. Una portada de la revista Time de septiembre de 2004, que alguien, con bastante mala leche, ha recuperado oportunamente. En ella aparece McCain junto a la presentadora y actriz Tina Fey, muy, muy parecida a la candidata Palin. La imagen es tan inquietante que no necesita comentario.
¡¡¡Dios nos proteja!!!
Vía Poynter y SuperTouch.
El Partido Republicano, al no contar con la complicidad del artisteo yanqui se evita ciertos malos tragos. En su caso, son los propios candidatos los que nos reportan imágenes antológicas. Como la que sin duda, es hasta el momento una de las imágenes más impactantes de la campaña. Una portada de la revista Time de septiembre de 2004, que alguien, con bastante mala leche, ha recuperado oportunamente. En ella aparece McCain junto a la presentadora y actriz Tina Fey, muy, muy parecida a la candidata Palin. La imagen es tan inquietante que no necesita comentario.
¡¡¡Dios nos proteja!!!
Vía Poynter y SuperTouch.
Etiquetas: Comunicación política, propaganda, videocracia
2 Comentarios
Pues la verdad es que es todo un tema antropológico este de las imágenes electorales -oficiales y extraoficiales-.... ¡Un mundo! La portada del Time no tiene desperdicio. Tiene como ese regusto kitsch de los 50 y al mismo tiempo un toque terrorífico. (De hecho los 50 según cómo son bastante terroríficos...) También me encanta lo de que "other upstanding citizens" nos expliquen por qué hay que votar....
Tienes toda la razón, parecen escapados de una peli de Ed Wood. Además tiene un aire morbosillo ¿Qué pensaría Mr.Freud del detalle de la corbata?
Saludos.